En este post os vamos a hablar de Neuromodulación Percutánea Ecoguiada y evidencia científica del protocolo LTP de la mano del equipo de investigación de NMP® y EPTE®_Ionclinics (Francisco Ortega y Raúl Valdesuso, docentes de la formación NMP® Oficial y fisioterapeutas en la Clínica de Fisioterapia y Osteopatía Francisco Javier Ortega), así como Enrique Velasco, Miguel Delicado del Instituto de Neurociencia de Alicante) y Patricia Beltrá López, investigadora del equipo y fisioterapeuta deportiva. El objetivo de este protocolo es producir una potenciación sináptica a largo plazo (LTP) en la vía del tacto para aumentar la inhibición de dicha vía sobre la nociceptiva. Os lo contamos a continuación.
Neuromodulación Percutánea- Protocolo LTP
Mediante el estudio llevado a cabo, se pretende evaluar cómo la potenciación sináptica de las fibras receptoras del tacto (de bajo umbral) afecta a las respuestas de la vía del dolor (alto umbral). Esta intervención se basa en la interacción que se produce en estas vías en las capas superficiales y profundas del asta dorsal de la médula espinal.
Para ello, realizan un estudio electrofisiológico de las células de la capa superficial (sustancia gelatinosa) y miden la corriente postsináptica excitadora evocada (eEPSCs) por los inputs aferentes de las fibras de alto umbral en la SG. Dicha corriente representa la fuerza de la conexión entre la neurona periférica nociceptiva y el sistema nervioso central a nivel de una sola célula.
El protocolo del experimento es el siguiente: primero miden dicha corriente sináptica eEPSCs, después aplican un protocolo de estimulación de fibras AB(bajo umbral) con diferentes frecuencias (4Hz,50Hz, 1000Hz) y luego vuelven a medir la eEPSCs para ver si ha cambiado la trasmisión nociceptiva. Para el protocolo eligen una intensidad de 10uA ya que miden que esta intensidad activa solo el 40% de fibras AB y algunas de bajo umbral de tipo Ad.
El resultado principal del estudio es que se da una mayor inhibición de las eEPSCs de la vía nociceptiva a los 15-20min de la estimulación de las fibras AB con altas frecuencias (50 y 1000Hz) tanto en animales sanos como en un modelo de daño neuropático. La mayoría de los resultados no ven diferencias entre 50Hz y 1000Hz, pero sí a 4Hz. Esto es lógico, pues 4Hz es una frecuencia demasiado baja para producir potenciación sináptica.
Estos resultados son interesantes para la aplicación de técnicas con este tipo de estimulaciones (AB-ES), ya que, en pacientes que no tienen disponible el sistema de modulación condicionada del dolor (CPM), estas intervenciones podrían servir para provocar analgesia de forma endógena, es decir, disminuir la transmisión de las fibras de alto umbral sin necesidad de la CPM, utilizando solo los circuitos intrínsecos del asta dorsal. Además, sugiere que protocolos de estimulación por encima de los 50-100Hz no añaden efectos adicionales al tratamiento.
Neuromodulación Percutánea- Protocolo LTP- Y esto, ¿para qué sirve en clínica?
Estos resultados permiten plantear terapias basadas en la fisiología sináptica y la estimulación del nervio periférico que produzcan una potenciación de la vía del tacto (no nociceptiva) para disminuir la transmisión nociceptiva por circuitos propios del asta dorsal de la médula sin necesidad de buscar mecanismos opioideosdescendentes como la CPM. Esto es útil porque muchos pacientes crónicos no los tienen disponibles (Tompra, N. y cols., 2016). Además, permite producir analgesia sin necesidad de introducir dolor por el camino.
Adicionalmente el estudio revela que utilizar protocolos por encima de 50-100 Hz para estimular neuronas periféricas no tiene un efecto añadido al tratamiento, al menos a nivel sinóptico. Esto probablemente se debe a que estas neuronas disparan como máximo a unos 15 Hz de media (aunque algunas llegan hasta 80 Hz) (Rau et al., 2016).
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